Hola amigos,
Los invito a una simple oración por nuestra especie. Cada uno, ruéguele a su Dios por misericordia, y por favor, permanezcan es sus casas y como niños juiciosos, lávense las manos una y otra y otra vez.
Afortunadamente nuestra profesión nos permitirá seguir, mientras haya internet y humanidad, con nuestras labores desde casa.
Desde lo más profundo de mi corazón les deseo que mi Dios los bendiga y los proteja, a cada uno de ustedes y a sus seres queridos.
Un fraterno abrazo